Florència

El reto de este proyecto era diseñar una vivienda aislada en una finca con una pendiente considerable, con el objetivo principal de crear una vivienda inclusiva para una persona con movilidad reducida. 
La vivienda se desarrolla en dos plantas: planta baja y planta primera. El acceso principal se encuentra en la fachada oeste, en la planta primera, para garantizar la accesibilidad. En esta planta se encuentran las áreas principales de la vivienda. La planta baja está destinada exclusivamente a un amplio trastero, accesible mediante ascensor. Además, al trastero también se puede acceder desde el exterior, gracias a una acera perimetral que rodea el edificio, compuesta por rampas y escaleras que, no solo conectan las plantas, sino que además crean un espacio de servicio, comunicado con el lavadero, ideal para tender la ropa.

La composición arquitectónica se distingue por dos volúmenes rectangulares diferenciados por el tipo de cubierta. El primer volumen, con una cubierta inclinada de tejas, alberga la cocina y la sala de estar. El segundo volumen, con una cubierta plana, alberga el resto de las estancias de la vivienda. En el punto de unión de los dos volúmenes, se ha colocado una ventana fija que dota al comedor y a la sala de estar de una entrada de luz indirecta.

Con la voluntad de respetar al máximo el entorno, hemos utilizado materiales característicos de la zona en los acabados exteriores. La cubierta inclinada está compuesta por tejas árabes, mientras que la fachada combina obra vista con carpintería de aluminio en un elegante tono gris oscuro. 

Este proyecto ha sido diseñado con atención a los detalles y respetando las características del entorno, creando una vivienda adaptada y funcional con un acabado moderno, lleno de contraste.